Un año se va
y tenemos la bendición de estar de pie,
para comenzar el 2010.
¡Les agradezco esa sutil compañía,
con la que me han recibido en sus corazones!
¡En el momento de la MEJOR CENA,
esa en que nos reunimos junto a Jesús,
los tendré
como una de las mayores intenciones,
para que el Santísimo los bendiga!
Les dejo mi alma
y este pensamiento que me gusta recordar.
"...Nadie es tan fuerte
como para hacer todo solo,
ni tan débil que no pueda ayudar..."
Es de Almafuerte.
Sirve como consigna.
Un abrazo grande.