"...Las verdaderas redenciones, nacen humildemente, humildemente, como aquélla que ocurrió en Belén, como SU infancia, su adolescencia..."
¡Un beso tuyo, María, un beso tuyo
ya da VIDA!
¡Madre santa, madre ÚNICA,
bendice nuestros hogares, nuestros trabajos,
intercede por nosotros,
ahora y siempre!
¡Dulce ternura de NIÑO,
ablanda nuestros corazones a TU medida,haz que re.nazca
nuestro niño interior
y sean
nuestras actitudes,
tan puras y dignas como las tuyas!
¡JESÚS adolescente...
penetra en el corazón de nuestros jóvenes,
imprégnalos de tu gracia, de lo noble e imperecedero,
de la bondad de lo esencial,
de las diciplinas enriquecedoras,
de los valores que hacen al hombre
mejorHOMBRE!
¡AMÉN!
¡Ven a nosotros, Jesús!