nuestro descarne, la entraña misma de la profundidad del alma.
Es en el dolor, donde perdemos el control de nuestro "todo".
Al perder un hijo ya nada importa. Ni la cara, la ropa, las comodidades, toda materia, porque se nos muda el alma a otra dimensión. Muere el ego, pisoteado por la impotencia de evitar su partida.
¡Y todo es levedad!
EL ALMA PIDE MÁS Y MÁS y nos distiende del ansia de "tener" porque hay una VIVENCIA que nos muestra que nada es más importante que el sentir, el amar y el dar vida.
Es una elevación anímica, cuando lo exterior muestra lo contrario.
Desde la intimidad esencial del "SER", AQUÉLLA VOZ COMPAÑERA, AMOROSA, SUS HUMORADAS, SU ESPÍRITU CONCILIADOR, AMIGABLE, ES COMO UN ARTE DE REINTEGRACIÓN A LO DIVINO .
"SIN DOLOR DE PARTO, NO HAY NACIMIENTOS..." (JAIME BARYLKO)
Es aprender a percibir en la resonancia del silencio fértil, el haz de luz que "él " dejó en su pasar. Se siente en el sol melificdo del otoño, se respira de la brisa pasajera, se oye en el trino de los pájaros, porque todo trae el emotivo recuerdo de lo perdido y nos lleva a la contemplación de lo que fue su entorno, "su adorno", lo que hizo que lo disfrutemos pleno en su enorme valor de contención hacia los demás. En su eterno "darse" que muchas veces no supimos ver o apreciar. Aunque desde mi intimidad de madre , siempre lo supe, me lo hizo palpitar en cada dificultad, cada desaliento, cada alegría o angustia que compartimos. ¡ÉL SIEMPRE ESTABA AHÍ!
___"Ya pasa, vieji, no te hagas problema, cuidate del frio, que duermas lindo, te amo, vieji..."
El dolor es como "la justicia que, como serpientes, sólo muerde a los descalzos".
Siempre parece injusto.
Pero también es en esos instantes donde descubrimos que EL PADRE está codo a codo.
Sentimos EL AMOR DE LOS AMORES, cercano, latente, penetrando nuestra identidad y trasfigurádola como suya, para renovar la armonía visceral que necesitamos como el aire mismo-
Muy lentamente, con Dios a mi lado, voy recuperando mi femineidad, mi respiración habitual, mi llanto se vuelve esperanza, porque EL me arrima ternura, dice mieles a mi oído para renovar fuerzas, regula mi andar antes vacilante, inseguro.
Es entonces, en estos momentos, donde el Espíritu me hace ver cuánta gente querida intervino en mi vida, dejando su buen cariño, fuente vital para resistir
Algunos son amigos de siempre. "AMIGOS". Los verdaderos amigos.
Otros son personas que "causalmente" Dios dejó pasar delante de mí con su encantada paz de la palabra justa, del hombro donde apoyar mi cabeza abrumada por los sentires.
Parecen ínfimos goces deleitables y son DONES MARAVILLOSOS, CASI EXTINGUIDOS...TEMPLANZA, PACIENCIA, TOLERANCIA.
¡Gente de mente tierna que imanta en su decir, en sus convicciones y su firmeza. Es así como también ayudan a afirmar nuevamente mi personalidad, imanta su alegría, su FE, su constancia. La manera afable que aplaca la angustia!
¡Me excede la ternura de Dios en mis fatigas y en su fidelidad!
¡GRACIAS PADRECITO... ES TAN GRANDE TU AMOR CUANDO EN TÍ DEPOSITAMOS NUESTRA DEBILIDAD...!
BLESS YOU!
